Ya se dejan oir rompiendo el aire conmovido -que diría el granadino vate asesinado- rumores horrísonos de agonías bufas.
Revestidas no obstante de la atrevida impostura de la ignorancia, la superchería y la maldad. Aun cabalgando con negras cruces a cuestas.
Negras como su alma.
Y emponzoña el aire la genuina mixtura del incienso más puro -de iglesia polvorienta- y la cera derretida pergeñando pequeñitos infiernos ambulantes por las recoletas callejas tomadas por juramentadas cofradías.
Por patibularias hermandades siniestras cual turbas enloquecidas sumisas de rituales sórdidos. Aun cuando los rostros que velan los embozos de verdugo y de fantoche -auténticos batmans- sean acaso más tetricos que la propia mascarada que los oculta. Entre ayes y liturgias de muerte y dolor.
Sotanas negras. Cucuruchos diabólicos. Aromas de orgia y aquelarre. Recuerdos de siniestros rituales sureños del pais de la violencia.
Impúdica y obscena la españa negra saca sus reliquias y pasos sanguinolentos a las calles entre terribles rituales que obligan a todos bajo pena de ignominia.
Y con la negrura del embozo, la hendiondez del cirio y de la tea; el loco aullido de la saeta proferida de gargantas rotas, gente de la peor calaña, bajo los ropajes siniestros, se purifica y se perdona.
Es la españa negra que sale a la calle y aventa su siniestro y mudo bagaje. Que a veces salpica de sangre aldeulelas encaladas
La iglesia católica tomando la calle con su genunina tramoya predispuesta.
Apártense los disidentes. Ocultense los réprobos.
Y volverán luego a sus casas.
Y a sus cosas.
Y guardaran el embozo que nunca logrará apolillarse.
Que el polvo no lograra socapar bajo húmedo manto corrosivo.
Que la tela, eso si, es de buena calidad.
Un años más el folcklore más retrogrado y cutre tomando la calles y las plazuelas.
A esperar que pase la fiesta.
Los peores en el peor momento
Hace 4 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario